jueves, 12 de mayo de 2011

Cuando el cuerpo dice que no es que no.

No sé si será el cansancio acumulado post media maratón o que ya empieza el calor de verano y aún no estoy acostumbrado, pero esta semana no ha habido forma de correr.
El lunes salgo a trotar un poco pero nada, no hay manera de bajar de 5 min el kilómetro. Pero bueno, se trataba de correr un poco tras la media.
Al final 12, 11 km a una media de 5:03
El martes descanso
El miércoles lo mismo, bajo a la ribera del Ebro pero nada, que no encuentro el ritmo. No voy cómodo. Me mojo en una fuente del parque del agua, me siento un rato en un banco pero a la vuelta lo mismo, que no hay forma. A casa, no pasa nada.
12,96 km a 4:59
Hoy pensaba subir a las antenas de Juslibol y hacer cuestas, pero al salir decido simplemente llanear por la ribera del Ebro. Tampoco pillo ritmo. Un poco mejor pero nada, en ningún momento puedo tirar un poco fuerte, no voy cómodo, así que tranquilamente a casa.
13,80 km a 4:52
Menos mal que no tengo a la vista ninguna carrera ni ninguna obligación. Todavía no se si correré los 10 k de Zaragoza. Pero si estos días tuviera una carrera, el pinchazo sería monumental. Igual tengo un poco de agotamiento por sobreentrenamiento.
Lo mejor, está claro, es descansar unos días, si acaso hacer algo de bici, y seguro que la próxima semana vuelvo a la rutina.

1 comentario:

Carles Aguilar dijo...

Tú mismo lo has dicho... hay que bajar de revoluciones de vez en cuando... El cuerpo es sabio y hay que escucharle aunque a veces no es lo que más nos apetezca... Unos días sin forzar la máquina y como nuevo... Por cierto, felicidades por la media maratón d Zaragoza, hiciste una gran carrera..!!