TRES VUELTAS A LA TIERRA EN BICI.

Todavía no!!!! me faltan 60 metros. La próxima salida, a la altura del primer semáforo terminaré la tercera vuelta a la tierra en bici.
Bueno, son unos pocos más de kms, hay que añadir los que hice los tres primeros años, desde que me compré mi primera bici de carreras hasta que me compré mi primer ciclocomputer para apuntar los kms, pero bueno, no creo que sean más de 10.000 kms los que habría que sumar.
Tres vueltas a la tierra, miles de aventuras, peligros, sustos, sufrimientos, alegrías, subidas, bajadas...
Luchando contra el clima extremo de Zaragoza, desde algún día con nieve, varios grados bajo cero, nieblas espesisimas que apenas se ve a varios metros por delante, cierzo fortísimos que alguna veces casi me ha tirado, otras empujando, como aquella vez en la carretera de Logroño con el cierzo fuerte empujando que adelanté al un tio en cliclomotor, que se picó le dió al gas a tope pero conseguí llegar antes que el a Zaragoza...
Calores tórridos (como estos mismos días) que parece que el asfalto arde y se derrite, pero que es un placer pedalear... Luvias, tormentas, algún granizo...
He visto incluso evolucionar las carreteras, al principio la única autovía era la de Logroño y la de Madrid hasta la Muela... Luego hicieron la de Valencia, la de Huesca...
Y evolucionar las bicis, el poner el cambio en la maneta del freno, los pedales automáticos, el manillar de triatlon, el carbono..
Luego las salidas a puertos míticos, el Aspin, el Tourmalet, Los lagos de Covadonga, Panticosa, Cerler-Ampriu, Marie Blanque...
Las dos Quebrantahuesos, la Marcha de los Lagos de Covadonga ...
Afortunadamente ningún accidente, (una vez me pilló un coche, y me destrozó la bici, pero sin consecuencias para mi) ni lesión... mucha mucha suerte.
Tres vueltas a la Tierra tragando insectos, con los dedos helados o sudando sin parar, pasando miedo bajando con viento o disfrutando en algún descenso tranquilo...
Tres vueltas a la Tierra, en cuatro bicicletas distintas, en 19 años, muchos culottes, mallots, calcetines, guantes, gorras, cascos, gafas de sol, gafas graduadas, cientos de cámaras, cubiertas, litros de aceite de engrasar ....
Tres vueltas a la Tierra, en bici, ese artefacto al que tanto le debo, que me ha dado tan buenos momentos... y malos: miedo, sustos, perros que han hecho esprintar, pinchazos inoportunos, averías, pájaras...
Tres vueltas a la Tierra en bici: Las tres primeras de otras muchas (espero)